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Un proyecto e-learning implica un acto educativo donde el educador y el educando se encuentran separados en espacio y tiempo (dependiendo de la modalidad e-learning que fundamente nuestro proyecto), la principal característica del e-learning es que el proceso educativo se dará mediado por las tecnologías de comunicación e información (TIC). Con base en lo anterior, si estás buscando implementar un proyecto e-learning en tu empresa, hay ciertos puntos que debes tomar en cuenta. En primer lugar, analizar en qué nos beneficia implementar un proyecto de esta índole, preguntándonos ¿Qué esperamos obtener del proyecto e-learning?
Para ello necesitamos comprender que, al trasladar nuestra capacitación presencial a una modalidad en línea, el aprendizaje que se obtenga será completamente autónomo, por lo que debemos generar estrategias educativas que mantengan la motivación por el contenido de nuestros participantes.
Al decidir emprender un proyecto e-learning, notaremos que se tendrán diversos ahorros importantes en comparación con una capacitación presencial debido a que no se necesita invertir en: personal de capacitación, ni costos administrativos tales como infraestructura, papelería, cafetería, entre otros.
También tendríamos un importante ahorro en cuanto al tiempo invertido en la capacitación, ya que no se tendría que dejar de trabajar para capacitarse y a la vez no se invertiría en costos de traslado en caso de ser necesario, ya que la capacitación puede llevarse a cabo en cualquier momento del día siempre y cuando se tenga una conexión a internet.
Como podemos observar, al trasladar nuestra capacitación a un proyecto e-learning tendremos muchos beneficios los cuales no sólo se verán reflejados en nuestra empresa al momento en que se inicia el proyecto, sino que también a futuro, teniendo siempre en cuenta el hecho que los modelos educativos evolucionan a la par que evoluciona la tecnología, por lo que también necesitamos modificar los modelos de enseñanza dentro de la empresa cada cierto periodo de tiempo.
Entre los beneficios que obtendremos se encuentran:
- Impulsar una cultura digital dentro de los integrantes de nuestra empresa, es decir, atender el rezago generacional entre los llamados nativos e inmigrantes digitales.
- Permitirá homogeneizar las habilidades y conocimientos de nuestro personal bajo ciertos estándares y calidad; de tal forma que todos tengan las mismas habilidades e información.
- El trasladar los contenidos a un modelo e-learning también nos permite crear un sistema de administración y gestión del conocimiento interno lo que a futuro nos permitirá prevenir que los contenidos sean obsoletos y poder renovarlos; así como hacer que la organización registre sus aprendizajes, para que “aprenda de sí misma”.
En general podríamos decir que existen 5 puntos principales a considerar antes de emprender un proyecto e-learning:
- Planeación estratégica: elegir el modelo educativo que guiará la evolución de nuestro proyecto.
- Infraestructura tecnológica: definir qué software se utilizará para la realización de nuestro curso y con qué infraestructura se los haremos llegar a los participantes.
- Producción de oferta educativa: elegir a los expertos tanto en contenidos como diseño gráfico, tutoría, programación, para crear contenido o comprar contenido ya existente.
- Operación de campus virtual: contar con un área encargada de gestionar las labores dentro del campus virtual (inscripciones, altas de alumnos, supervisión de tutores, etc.)
- Evaluación educativa: en este punto se establece un sistema de calidad y mejora del proceso de capacitación a través de evaluaciones en distintos momentos del proyecto.
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